Comenzaron a marcharse,
en silencio, sin hacer ruido,
apenas en un susurro.
Se fueron en un murmullo,
despacio, con la calma
del deber cumplido.
Las palabras
fueron callando,
dejando paso al silencio,
ese que queda tras la tormenta
dejando paso a la tranquilidad.
Satisfechas de lo vivido
poco a poco
se iban retirando
dejándolo marchar,
emocionadas pero satisfechas
de haber compartido,
de haber vivido.
In memórian a Enrique Gutiérrez y los suyos
en silencio, sin hacer ruido,
apenas en un susurro.
Se fueron en un murmullo,
despacio, con la calma
del deber cumplido.
Las palabras
fueron callando,
dejando paso al silencio,
ese que queda tras la tormenta
dejando paso a la tranquilidad.
Satisfechas de lo vivido
poco a poco
se iban retirando
dejándolo marchar,
emocionadas pero satisfechas
de haber compartido,
de haber vivido.
In memórian a Enrique Gutiérrez y los suyos